Senador Blanco solicita que se desmantele de forma urgente el radar instalado en Tolhuin.

Asimismo, solicita que se lleve a una investigación exhaustiva para determinar las responsabilidades que llevaron a la instalación de dicho radar, incluyendo la evaluación de las acciones y decisiones tomadas por el gobierno provincial de Tierra del Fuego en este asunto e insta al Poder Ejecutivo Nacional a fortalecer y garantizar la soberanía aeroespacial de la Argentina, tomando las medidas necesarias para salvaguardar la seguridad y la integridad nacional en relación con el espacio aéreo.

 “La Jefatura de Gabinete de Ministros estableció mediante una disposición (Di-2023-15-APN-SSTYCO#JGM) del 23 de agosto del corriente la cancelación total de la autorización otorgada con carácter precario a la mencionada empresa. Ya ha pasado un tiempo prudencial desde que se publicó esta disposición sin que nadie en la provincia de Tierra del Fuego haya movido un dedo para hacerla efectiva. El radar sigue instalado en la Estancia El Relincho en las cercanías de Tolhuin sin que funcionario alguno haya asegurado fehacientemente que el mismo no funciona”, explicó Blanco.

“Considero que esta estación terrena debe ser completamente desmantelada y que la cadena de mando dependiente del Poder Ejecutivo Nacional no puede ser quebrada. Si se dispuso la “cancelación total” el radar debe ser retirado, removido, desmantelado. Al menos eso es lo que indica el sentido común y lo que parecería estar ordenando la disposición mencionada”.

“Ya han pasado casi tres meses desde que descubrí esta maniobra turbia que vulnera nuestra integridad aeroespacial y nuestra soberanía nacional. Luego de varias idas y venidas, pedidos de informe al Poder Ejecutivo y mi acción decidida para salvaguardar nuestro interés soberano, el Ministerio de Defensa se expidió al respecto y resolvió solicitarle a la Jefatura de Gabinete que cancele la autorización para funcionar del radar”.

“Sólo cuando el radar no esté más, tendremos la plena certeza de haber recuperado soberanía aeroespacial y suprimido una amenaza activa que, además, tiene rango y capacidad efectiva para vigilar la órbita baja correspondiente al sur chileno”.

“Una vez quitado el radar habrá que realizar una profunda investigación que avance sobre las responsabilidades que en esto tuvo, sin la menor duda, el gobierno fueguino y, de caber, cuál ha sido la cadena de facilitación (por no decir complicidades) que hubo desde el Poder Ejecutivo Nacional”, finalizó el senador fueguino de Juntos por el Cambio.