Crystal Hefner reveló que jamás estuvo enamorada de su ex esposo, el fallecido fundador de Playboy, Hugh Hefner.
En las declaraciones difundidas por la ex modelo, también reveló que se vio enfrentada a desequilibrios de poder durante su estancia en la Mansión Playboy, a la que describe lejos del lujo y la fantasía publicitados.
ACTUALIDAD22 de enero de 2024Karukinka NoticiasCrystal Hefner, ex esposa del difunto fundador de Playboy, Hugh Hefner, admitió que nunca estuvo “enamorada” de él, pese a que contrajeron matrimonio en 2012 y permanecieron juntos hasta su fallecimiento en 2017. Según una entrevista brindada a la revista People, Crystal relató aspectos de su vida dentro de la Mansión Playboy, destacando desequilibrios de poder y una vida que distaba de ser tan llena de lujos y fantasía como parecía desde el exterior.
La ex modelo y empresaria lanzará su memoria titulada “Solo digo cosas buenas: Sobrevivir a Playboy y encontrarme a mí misma” el 23 de enero de 2024. Según indicó en entrevista con el New York Post en julio de 2023, el libro surge de una promesa hecha a Hugh que, tras su deceso en septiembre de 2017, sólo diría cosas positivas sobre él.
Sin embargo, además de admitir que no estaba realmente enamorada del magnate, aseguró que existía un desequilibrio de poder que sufrió durante su estancia en un entorno que consideró cargado de éxito y fantasía pero con un alto precio. “Me di cuenta de que me enfrentaba a un desequilibrio de poder realmente grande”, dijo la ex modelo a la revista People. “Parecía un mundo de éxito y fantasía, pero todo el mundo tiene que acostarse con una persona de 80 años. Hay un precio. Todo tiene un precio”.
Así fue su relación
Nacida en Lake Havasu, Arizona, Crystal Hefner creció entre Estados Unidos y Reino Unido, y se estableció finalmente en San Diego, California, donde estudió psicología y trabajó como modelo a tiempo parcial.
Se conoció con Hefner en 2008 durante una fiesta de Halloween en la Mansión Playboy, donde conectaron gracias a un interés compartido en la psicología. Tras esa primera reunión, Harris se mudó a la mansión y se convirtió en Playmate en diciembre de 2009. Años más tarde, luego de poner fin a su carrera como modelo, inició una carrera en el sector inmobiliario, inspirada por la trayectoria de su madre en el mismo campo.
La pareja se había comprometido en 2010, pero cancelaron su primer intento de matrimonio poco antes de la ceremonia planeada para junio de 2011. Finalmente consolidaron su relación en una boda privada la víspera de Año Nuevo de 2012 en la Mansión Playboy, tras reconciliarse ese mismo año, según publicó el diario británico Daily Mail.
La mansión Playboy
La modelo, de 37 años, describió la residencia gótico-tudor construida en 1927, que Hefner adquirió en 1971 y está situada en el lujoso barrio de Holmby Hills en Los Ángeles, como un lugar que pese a su historia y su apariencia opulenta, había caído en la decadencia. “Este lugar no se limpia bien y hay moho, y después de un tiempo se sentía degradado y asqueroso”, relató Crystal.
Además de las condiciones del inmueble, la exmodelo también se refirió al tratamiento de los animales exóticos que habitaban en la propiedad, revelando que no parecían recibir el cuidado adecuado: “Sentía que estaba constantemente llorando por todo y por todos allí”, dijo. “Todos esos animales se veían tan deprimidos y tristes. Era todo una ilusión”, expresó.
El control que Hugh Hefner ejercía sobre las mujeres que vivían en la Mansión no se limitaba a su aspecto físico, sino que también se extendía a su manera de vida. “Nos daba una asignación semanal que esperaba que gastáramos en nuestro aspecto”, declaró Crystal, detallando cómo incluso el color de su esmalte de uñas o la decisión de llevar un piercing en el ombligo estaban sujetos a la aprobación de Hefner.
Crystal también habló sobre la presión que sentía por mantenerse a la altura de las expectativas de belleza en los ojos de Hefner, llegando a sufrir ampollas en el cuero cabelludo por las constantes exigencias de teñirse el cabello: “Pero por alguna razón pensaba que todo esto era normal y lo que significaba ser vista como hermosa en los ojos de Hef”.
Sobre su llegada a la Mansión Playboy en 2008, Crystal describió cómo se veía a sí misma: “En ese momento, pensé que estaba en la cima”. Su deseo de ser la favorita de Hefner la llevó a perderse a sí misma en el proceso: “Pensé, si solo me gusta todo lo que a él le gusta y hago todas las cosas que él quiere que haga, entonces soy la favorita. Y lo fui, pero me perdí a mí misma en el proceso”.
Otras “conejitas”
Holly Madison, ex conejita de Playboy también dio detalles sobre su difícil experiencia viviendo en la Mansión Playboy. Según publicó FOX News, su primer encuentro sexual con Hugh Hefner fue “traumático”. Madison, quien estuvo vinculada sentimentalmente con el magnate desde 2001 hasta 2008 y participó en el reality “The Girls Next Door”, reveló haber enfrentado una lucha con la dismorfia corporal y el abuso verbal.
Según Madison, que se mudó a la mansión cuando tenía 21 años, Hefner la “hacía sentir que no era lo bastante guapa, y yo miraba a todos los demás y me preguntaba constantemente qué tienen de diferente y por qué son mucho mejores” contó Madison, también a People en noviembre de 2023.
Tras dejar el emblemático inmueble luego cinco temporadas del programa televisivo, Madison publicó su memoria “En la madriguera del conejo” en 2016, y más recientemente participó en el podcast “El Poder: Hugh Hefner” en 2021 y colaboró con el documental de A&E “Los Secretos de playboy” a principios de 2022.
Por su parte, Kendra Wilkinson ex modelo y también estrella de la serie “The Girls Next Door” del canal E!, reveló en una entrevista con el mismo medios que su tiempo en la reconocida publicación “realmente arruinó toda su vida”. Wilkinson, quien se incorporó al elenco del programa a los 18 años, aseguró estar “arrepentida” por las decisiones tomadas durante esa época.
“El tiempo hace muchas cosas raras. Con el tiempo las perspectivas empiezan a cambiar. Tus ideas empiezan a cambiar sobre el ‘¿Por qué?’”. Dijo a People. “Empiezas a preguntarte por qué. ¿Por qué hice eso? ‘¿Por qué me acosté con un hombre de 90 años a esa edad?’ ‘¿Por qué hice eso?’ ‘¿Por qué fui a la mansión en primer lugar?’ ‘¿Por qué me puse implantes de seno?’ ‘¿Por qué me decoloré el cabello de rubio?” se cuestionó.
Y continuó: “eso ya no es lo que soy” y esperaba que la gente del mundo de su nueva carrera inmobiliaria no la juzgara. “Soy una madre soltera de dos hijos, como si estuviera empezando un nuevo negocio. Eran otros tiempos. Eran como mis locos veinte años”.